Inditex «made en Marruecos»

Estudio de la ONG Setem para la campaña ‘Ropa Limpia’

Inditex ‘made in Marruecos’: 65 horas de costura a la semana por 178 euros al mes

Extraído de http://www.elmundo.es/elmundo/2012/01/14/galicia/1326541713.html

Trabajadora de un taller textil de la ciudad marroquí de Tánger. | SetemTrabajadora de un taller textil de la ciudad marroquí de Tánger. | Setem

  • Una investigación afirma que se vulneran los derechos laborales en Tánger
  • El 40% de las costureras de Zara no cobran para cubrir necesidades básicas
  • El estudio revela que el gigante incumple sus propios códigos de conducta
  • La situación se repite en Mango, El Corte Inglés, Cortefiel y otras firmas
  • Según la ONG Setem se falsean las auditorías escondiendo a menores en cajas

Adquirir una prenda de ropa de las marcas del grupo Inditex que se haya confeccionado en Marruecos supone refrendar un sistema de producción en el que las trabajadoras acumulan hasta 65 horas a la semana detrás de una máquina para cobrar un salario de 178,72 euros mensuales, condiciones laborales que las mantienen «viviendo en situación de pobreza» mientras el fundador del imperio textil, Amancio Ortega, se consolida como la mayor fortuna de España.

La situación se atestigua en la investigación ‘La moda española en Tánger: trabajo y superviviencia de las obreras de la confección’, elaborada para la ‘Campaña Ropa Limpia’ de las ONG española Setem y gallega Amarante Setem y que analiza las condiciones de vida y trabajo precarias que sufren las trabajadoras en talleres textiles de la ciudad de Tánger.

Inditex no es la única que se beneficia de esta situación. Las empresas españolas de moda más importantes tienen factorías propias o proveedores en Marruecos. El Corte Inglés e Induyco, Cortefiel, Mango y muchas otras firmas europeas «operan en el mercado marroquí aprovechando unos costes de producción claramente inferiores a los de la Unión Europea y la cercanía geográfica».

No en vano, España es el cliente más importante de las exportaciones de ropa marroquíes desde 2006. En lo que respecta a Inditex, en 2007, el 10% de la ropa de sus marcas Zara, Bershka, Stradivarius, Oysho, Uterqüe, Pull & Bear, Zara Home y Massimo Dutti se confeccionaba en Marruecos.

Incumple sus propias normas

El código de conducta de Inditex, que recoge los estándares laborales mínimos que deben respetar todas sus fábricas proveedoras, establece que el máximo de horas que podrán realizar las personas trabajadoras en toda su cadena de suministro son 48, con la posibilidad de realizar, de forma esporádica, un máximo de 12 horas extraordinarias.

El estudio se basa en encuestas a 118 obreras de la asociación marroquí Attawassol. Las realizadas a las trabajadoras que cosen para Inditex reflejan que lo incumplen: la jornada habitual del 68% es de entre 45 y 54 horas, y la del 30% supera las 55 horas semanales de forma habitual. Además, el 62% de las obreras aseguran que «las puntas de trabajo con más carga laboral de lo habitual se repiten con mucha frecuencia».

Al respecto, el estudio recoge que «la realidad parece chocar con el texto del código de conducta de la empresa que reza, literalmente: «[las horas extra] no se requerirán de manera habitual y deberán ser liquidadas en cuantía superior a la hora normal, de acuerdo con lo establecido en la legislación vigente».

Salarios que no cubren lo básico

La investigación recoge que, en materia de salarios, el código de conducta de Inditex exige que sus proveedores paguen el salario mínimo de su país. Además, el acuerdo marco internacional que Inditex ha firmado con la principal federación sindical internacional del sector (ITGWF) recoge el compromiso de pagar un salario que permita cubrir las necesidades básicas de las personas trabajadoras y de sus familias y otras necesidades «razonables».

Aunque el 75% de las encuestadas que trabajan en proveedores de la empresa gallega reciben el SMIG, un nivel de cumplimiento «algo superior al de las empresas que no están en su cadena de suministro», las personas que cosen para Inditex «muestran la misma precariedad o incluso algo mayor que las de las obreras de otros empleadores».

Así, «el 40% afirma que no puede cubrir sus necesidades ni las de sus familias o que lo hacen con muchas dificultades». Entre las obreras sin relación con Inditex esta proporción es del 31%.

Mango, un patrón que se repite

Mango es la segunda empresa de carácter internacional más mencionada entre las trabajadoras encuestadas. De las 118 obreras, 37 trabajaban para una empresa proveedora de la firma catalana en el momento de la encuesta. De ellas, 31 afirmaban que en su fábrica también se confeccionaban artículos de firmas de Inditex.

El estudio recoge que «Mango expresa desde hace años su voluntad de transparencia hacia los actores sociales y la materializa facilitando la lista de proveedores a SETEM (en representación de la Campaña Ropa Limpia española)» y que la propia empresa ya reconoció en su memoria 2010 «algunos incumplimientos de su código de conducta».

La empresa indicó que había dado un plazo de seis meses para la corrección de estas problemáticas. Sin embargo, «en el momento de las encuestas sólo un 3% de las obreras encuestadas que confeccionan la ropa de Mango expresaron que su jornada habitual era de menos de 45 horas. Por el contrario, un 62% afirmaron realizar jornadas entre 55-65 horas, y un 35% dice trabajar más de 55 horas semanales».

El 54% de las trabajadoras de proveedores de Mango afirmaron que estos picos de trabajo se repetían de forma muy habitual y sólo un 68% reciben un salario igual o superior al SMIG marroquí.

Abusos verbales y físicos

El informe descubre las duras condiciones de las obreras de confección marroquíes: exceso de horas de trabajo, bajos salarios, abusos verbales y físicos, arbitrariedad en la contratación y el despido, medidas disciplinarias desproporcionadas y obstáculos a la acción sindical.

Recoge que las horas extras son obligatorias y no se suelen remunerar, que prolongan la jornada hasta las 12 horas diarias, seis días a la semana por salarios que no superan los 200 euros mensuales, y que, en ocasiones, están por debajo de los 100 euros al mes.

A las trabajadoras más jóvenes, a menudo menores de 16 años, «se les hace trabajar sin contrato las mismas horas que el resto, pero cobrando 0,36 euros la hora, tres veces menos que sus compañeras».

El autor del informe, Albert Sales, indica que «estas empresas tienen en su mano la capacidad, tanto de generar situaciones de explotación laboral, como de evitarlas» y que muchas han asumido códigos de conducta y la obligatoriedad de pasar auditorías en los talleres.

Estos compromisos han quedado en papel mojado. Una trabajadora de una fábrica proveedora de una gran empresa textil asegura en el estudio que «cuando aparecen auditores por sorpresa, los supervisores esconden a las trabajadoras menores en la azotea o en cajas de ropa vacías».

Vídeo: ¿Qué es el CJ?, por SETEM

De una manera clara, sencilla y didáctica queremos compartir cuáles son las bases del comercio justo, por qué es importante inclinarse por él, y cuáles son las diferencias con otras formas de consumir. ¡Comprométete con un mundo más justo e igualitario y disfruta de productos con un valor añadido!

Elaborado por SETEM

Cómic, ¿Qué es el CJ?

Cómic: ¿Qué es el Comercio Justo?

Juan y María descubren que la tienda de la esquina de toda la vida ya no existe…y no es la única…su calle parece un barrio fantasma, ¿Qué está ocurriendo?,¿Tendrá algo que ver con estos cierres la apertura de un nuevo centro comercial?

A través de un cómic, Iago Araujo Molina nos inicia al funcionamiento del mercado internacional de materias primas, a los impactos de las grandes superficies sobre la economía local, las tiendas de barrio, el campesinado y el medio ambiente, y nos plantea alternativas de comercio justo y consumo responsable como tiendas de comercio justo, cooperativas de consumidores/as o mercados locales.

Informe «El Comercio Justo en España 2013. Diagnósticos y alternativas en clave europea»

31,1 millones de euros fue la facturación de productos de Comercio Justo registrada en España en 2013, lo que supone un crecimiento del 10% respecto al año anterior. Este es el principal dato del informe “El Comercio Justo en España 2013. Diagnósticos y alternativas en clave europea”, presentado esta mañana. El 70% de las compras se produjo en establecimientos de hostelería y grandes superficies. Por el contrario, las tiendas de Comercio Justo ven descender sus ventas, que suponen el 20% del total.

La publicación ha sido elaborada por la Coordinadora Estatal de Comercio Justo (CECJ) con la aportación de datos de venta deFairtrade Ibérica, y cuenta con financiación de la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo.

El informe confirma el proceso de cambio en el que está inmerso el Comercio Justo desde hace unos años. Las ventas continúan aumentando debido a la mayor cantidad de lugares de venta donde se pueden encontrar estos productos, que conviven con las tiendas y organizaciones de Comercio Justo. Así, el llamado canal HORECA (hostelería, restauración y catering) registró el 38% de las ventas de productos de Comercio Justo, y las grandes superficies y supermercados el 30%. El pequeño comercio representó el 28’3% de los ingresos del sector, donde las tiendas de Comercio Justo representa un 20% y el resto otro tipo de minoritas (herbolarios…).

Son las tiendas de Comercio Justo las que están sufriendo las consecuencias de la crisis. Estos establecimientos, gestionados por las organizaciones de la CECJ que iniciaron el camino de esta alternativa comercial y que hasta 2008 eran responsables de aproximadamente el 70% de las ventas, hoy sufren la caída de sus ingresos. Si en 2009 las tiendas de Comercio Justo facturaron más de 10 millones de euros, en el último año ingresaron 6,3 millones.

Nos preocupa mucho esta situación ya que las tiendas son el núcleo del movimiento. La bajada de ingresos dificulta su actividad de movilización y sensibilización, que es una parte esencial del Comercio Justo”, explica Mercedes García de Vinuesa, presidenta de la CECJ.

De los productos de Comercio Justo vendidos en España, tres de cada cuatro llevan el sello Fairtrade, principal certificación a nivel mundial. Durante 2013 la venta de dichos productos en nuestro país aumentó un 6%.“Se trata de un avance significativo pero todavía queda mucho trabajo que hacer y camino por  recorrer con los diversos agentes de la sociedad española”, ha comentado Álvaro Goicoechea, director de Fairtrade Ibérica.

La alimentación continúa liderando el sector, con un aumento del 11% respecto al último año. Nueve de cada diez productos vendidos de Comercio Justo fueron de alimentación. Solamente el café está detrás de la mitad de las compras de productos Justos en España. Le siguen los dulces, principalmente el azúcar (24% de las ventas), el cacao (5%) y otros productos elaborados (mermeladas, miel, galletas, zumos…).

La artesanía, que registra menos del 8% de las ventas totales,se mantiene en niveles bajos tras las caídas de los últimos años. Dentro de este grupo, los artículos más vendidos son los complementos, ropa y textil de hogar. “Además de ser un sector más vulnerable a la crisis, la mayor parte de la artesanía se vende en el pequeño comercio. Estas pueden ser las causas que expliquen sus bajos niveles de venta”, analiza García de Vinuesa.Por último, productos como la cosmética representan casi un 2% de la facturación.

A pesar del aumento en las ventas, España está muy lejos de los niveles de compra de Comercio Justo en otros países europeos. Si en Europa la media por habitante y año en estos productos es de 10,3 euros, en nuestro país es inferior a 70 céntimos (66’8 céntimos).

De hecho, España es uno de los países europeos donde menos Comercio Justo se consume.

Por debajo solo se sitúan Letonia, Lituania y la República Checa. A la cabeza se encuentran Suiza (39 euros de media por habitante y año), Reino Unido (30 e.), Finlandia (28 e.) y Luxemburgo (20 e.).

En cuanto al origen de los productos, las entidades miembro de la Coordinadora Estatal de Comercio Justo importaron artículos de más de 127 organizaciones de 34 países. Los productos alimenticios proceden, en su mayoría, de África y América Latina. Del continente negro también llegan gran parte de las materias primas con las que se realizan productos de cosmética. La artesanía tiene su origen principalmente en Asia y, en menor medida, en América Latina. Tres de cada cuatro de estas organizaciones productoras adoptan formas jurídicas de la economía solidaria, es decir, son cooperativas, asociaciones o fundaciones. La gran mayoría están avaladas por la Organización Mundial del Comercio Justo y muchas de ellas certifican sus productos a través de sellos como Fairtrade, los dos principales organismos internacionales que velan por el cumplimiento de los principios del Comercio Justo.

Análisis del impacto del comercio europeo

Además, la publicación “El Comercio Justo en España 2013. Diagnósticos y alternativas en clave europea” incluye varios artículos. El análisis de ventas se completa con un texto de ConsumeHastaMorir que reflexiona acerca de la supuesta libertad de elección de los y las consumidores.

Los dos bloques siguientes analizan la importancia de las políticas de la Unión Europea en el comercio internacional.El segundo capítulo se centra en los impactos que provoca el comercio europeo en las organizaciones productoras de América Latina, África, Asia y Europa. Dichos textos están firmados por el Observatorio de Multinacionales en América Latina (OMAL), Campaña Ropa Limpia, Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) y Asociación General de Consumidores (ASGECO).

El tercer capítulo plantea propuestas económicas dirigidas a favorecer una mayor justicia en las políticas comerciales europeas, como el Alternative Trade Mandate (Mandato Alternativo de Comercio), una estrategia europea para el Comercio Justo (texto escrito por Fair Trade Advocacy Office) y la compra pública ética (texto de IDEAS).

Extraído de http://comerciojusto.org/el-comercio-justo-en-espana-facturo-31-millones-de-euros-en-2013-un-10-mas-que-el-ano-anterior/

Informe aquí El CJ en España 2013, Diagnósticos y alternativas en clave europea